Colombia vive su peor ola de violencia por parte de grupos armados desde el acuerdo de paz de 2016. Actualmente, al menos 34 personas están secuestradas.
“Insto a todos los grupos ilegales y armados a detener los secuestros, un crimen que viola los derechos humanos y la dignidad humana de los 34 rehenes”, dijo el representante colombiano de Derechos Humanos, Caros Camargi, en un mensaje de video a los medios del país. No proporciona más información sobre cuánto tiempo han tenido a los 34 como rehenes o quién los ha secuestrado.
Camargo dice que el número es probablemente superior a 34 y señala que existe un gran temor entre la gente a denunciar personas desaparecidas.
A lo largo de seis décadas de conflicto armado que involucró a grupos guerrilleros, narcotraficantes y organizaciones paramilitares, el secuestro fue una táctica y una fuente de ingresos de uso frecuente. En el peor de los casos, un promedio de nueve personas fueron secuestradas por día.
Tras deponer las armas como parte del acuerdo de paz de 2016, varios exlíderes de la guerrilla de las FARC han sido acusados de unos 21.000 secuestros. Si se declaran culpables y pagan una reparación, pueden evitar el encarcelamiento, pero ser castigados de otras formas.