Los precios del petróleo se dispararon este viernes ante el temor a un conflicto en Oriente Medio después del asesinato del general iraní Qasem Soleimani en Bagdad, Irak, por un ataque estadounidense.
A media mañana en Londres, el barril de Brent subía 4,5%, y el de WTI aumentaba 4,1%, dólares, ante el temor de los inversores a un conflicto en la región.
Más tarde, el WTI ganaba un 3,8%, hasta US$63,50 el barril, y el Brent un 3,8%, hasta 68,79 dólares.
“Temen que Irán tome represalias por el asesinato de Soleimani”, dijo a la AFP Thina Margrethe Saltvedt, una analista de Nordea Markets, y explicó que Teherán podría atacar “instalaciones petroleras o de infraestructuras de transporte”.
El líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Jamenei, pidió una “severa venganza” por la muerte de Soleimani.
Según Cailin Birch, una economista de The Economist Intelligence Unit, los mercados temen sobre todo “un conflicto más amplio”.
“La importancia deriva menos de la pérdida potencial de los suministros de petróleo iraní (…) que del riesgo de que se pueda desencadenar un conflicto más amplio que arrastre a Irak, Arabia Saudita y a otros”, dijo a la AFP.
“También existe un riesgo significativo de que Irán lance un ataque selectivo contra barcos estadounidenses en la región, lo que podría interrumpir los flujos de petróleo en el mar y hacer que los precios sigan aumentando”, añadió.
Los precios del petróleo se dispararon en septiembre tras los ataques contra dos instalaciones petroleras de Arabia Saudita que redujeron brevemente a la mitad su producción de crudo.
Las bolsas también se vieron afectadas. Fráncfort llegó a perder 1,5% mientras otras plazas europeas sufrieron pérdidas menores.
En Wall Street, el Dow Jones empezó la jornada perdiendo 300 puntos.
Trump acusó a Irán de ese ataque y de otros contra algunos petroleros que circulaban por el Golfo.
“El mercado recuerda muy bien el inesperado ataque con aviones no tripulados contra Saudi Aramco [la petrolera saudita] el pasado otoño”, señaló Saltvedt.
Sin embargo, Birch descarta la idea de un conflicto generalizado.
“No esperamos un aumento de precios en un solo día, en términos porcentuales, como el 10% de septiembre de 2019, cuando se atacaron las infraestructuras petroleras sauditas”, apunta.
Pese a todo, la muerte de Soleimani supone un paso más en la escalada en las tensiones entre Estados Unidos e Irán.
“Aunque todavía creemos que es improbable una guerra abierta entre EEUU e Irán, esta muerte elimina la posibilidad de negociaciones entre ambos durante todo 2020”, según Birch.
Tras el ataque en Irak, los inversores apostaron por valores seguros, con subidas del yen frente al dólar y del oro, que alcanzó casi un récord en cuatro meses, hasta más de 1.550 dólares la onza.