El Omikron variante BA. 2.75, que ha sido bautizado como «Centauro» o » Centaurus», está causando preocupación entre los virólogos.
Hasta ahora se ha descubierto en la India, Reino Unido, Estados Unidos, Australia, Alemania y Canadá, entre otros, escribe The Guardian.
«Centaurus» debería poder propagarse más rápido que otras variantes de omicron, y rápidamente se ha convertido en una variante dominante sobre la BA. 2, que ha dominado en varios países hasta ahora.
– Las nuevas variantes siempre se propagan más rápido cuando toman el control, por lo que no hay nada extraño en eso. Si aun no está en Noruega, probablemente lo veremos aca en cualquier momento, dice Gunnveig Grødeland, investigadora cientifica especialista en el desarrollo de vacunas e inmunología de la Universidad de Oslo.
– Lo que sabemos de esta variante es que tiene una gran cantidad de mutaciones, y sobre todo en la zona donde se adhieren los anticuerpos que pueden evitar que el virus entre en nuestras células. Al igual que con las variantes anteriores de omicron, no hay razón para esperar que los anticuerpos de bloqueo que se han formado, ya sea después de la vacunación o de una infección previa, lo protegerán en particular contra esta. Puedes volver a infectarte, dice Grødeland.
– Probablemente podamos ver casos individuales durante las próximas semanas. Esta es una variante de la que somos particularmente conscientes, ya que tiene varias mutaciones que pueden tener una mayor capacidad para evitar la inmunidad de las vacunas y las infecciones previas, escribe el asesor principal de FHI, Torstein Aune, en un correo electrónico.
Las vacunas han perdido el efecto contra la infección
Gunnveig Grødeland dice que las vacunas ya no protegen contra infecciones o contagios leves. Por lo tanto, uno debe esperar poder infectarse una y otra vez.
– Es importante entender cómo funcionan las vacunas, porque lo que no hacen es proteger contra infecciones y enfermedades leves. Ya no hacen eso, y no lo han hecho por un tiempo ya. Las vacunas se basan en la variante de Wuhan, y hay una diferencia tan grande con las nuevas variantes que las vacunas ya no la toman. Pero la protección contra enfermedades graves sigue intacta. Esto muestra todo lo que tenemos de datos, dice Grødeland.
Además de estos anticuerpos neutralizantes que pueden bloquear el virus, se forman importantes anticuerpos contra otras partes del virus y las células T. El denominador común es que no pueden prevenir la infección, pero estos anticuerpos pueden, por ejemplo, marcar el virus para que otras células inmunitarias lo reconozcan y puedan eliminarlo de nuestro cuerpo más rápidamente. Las células T reconocen y eliminan las células de nuestro cuerpo que están infectadas con virus. Esto previene enfermedades graves, pero estas respuestas inmunitarias no evitarán la entrada del virus ni nos darán una enfermedad leve.
– Tampoco es la protección contra infecciones lo más importante, es la protección contra enfermedades graves lo que se aplica, y allí la protección contra vacunas y enfermedades previas sigue siendo buena, agrega Grødeland.
Dice que es importante que los que son mayores ya de edad y están en grupos de riesgo tomen la cuarta dosis, porque son ante todo los que tienen un alto riesgo de enfermarse gravemente. Esto reducirá la probabilidad del individuo, pero también permitirá que el servicio de salud se ocupe de lo que pueda derivarse de una enfermedad grave.