El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, atacó violentamente este lunes las prácticas comerciales de China, entre ellos, “la manipulacion” del dolar, y lanzó un ultimátum a su par del país asiático, Xi Jinping, reforzando aún más la incertidumbre sobre el desenlace de la disputa comercial entre los dos países.
En los últimos meses, Trump impuso por etapas aranceles de 25% a importaciones provenientes de China por 250.000 millones de dólares y amenaza con ampliar los derechos aduaneros sobre otros 300.000 millones de dólares.
Trump intenta que China no sólo cambie su política comercial sino obtener de Beijing una serie de compromisos sobre el respeto de la propiedad intelectual, el fin de las transferencias forzadas de tecnología y el abandono de las subvenciones a las empresas estatales.
El presidente estadounidense argumenta en su favor que su política ha tenido impacto sobre la economía de China, lo que llevaría a Beijing a buscar un acuerdo.